Si bien pudiera considerarse que es muy pronto para hablar de cuáles serán las alianzas partidistas que, se conformarán para hacer frente a la elección gubernamental del año próximo; la realidad es que,por la complejidad e importancia electoral del estado de México, los tiempos políticos se están adelantando y las cúpulas partidistas ya han comenzado a delinear sus estrategias.
Morena, en una conferencia de prensa realizada a principios de marzo de este año, informó que para la elección estatal de 2023 irían en alianza con el PT y el PVEM, aunque no descartan incorporar a otros partidos. En Morena los candidatos visibles, todos ellos integrantes del llamado grupo Texcoco, son Delfina Gómez, Higinio Martínez y Horacio Duarte.
En esta alianza morenista, el candidato o candidata, se elegirá desde palacio nacional, por lo cual podrían no presentarse fisuras. Sin embargo, para el senador Higinio Martínez, tal vez sería su última oportunidad para ser por segunda vez, candidato a la gubernatura mexiquense, ya que, para la próxima elección, tendría casi 73 años de edad.
En cuanto a la otra gran alianza, en la cual se perfilarían PRI-PAN-PRD, el proceso de negociación para definir el partido que encabezará dicha alianza,ya ha comenzado y lo interesante en este asunto, esque se ha puesto sobre la mesa, la candidatura a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, para2024.
De ser cierta esta versión, la lógica plantearía que,para el estado de México, el PRI encabezaría la alianza y para la Ciudad de México, el candidato saldría de las filas del PAN. Esta situación va a permitir que la alianza vaya con mayor cohesión y con grandes posibilidades de triunfar en las urnas.
En el PRI, las figuras más notables son Alejandra del Moral, Martha Hilda González y Ana Lilia Herrera. Sin embargo, la mejor posicionada es, Alejandra del Moral, quien, dentro de su trayectoria política, ha sido dirigente estatal del PRI durante los últimos cinco años(2017-2022). Alejandra conformó y conoce muy bien la estructura del partido y a sus líderes locales, y se le reconoce su trabajo y liderazgo. Asimismo, fue quien encabezó, por parte del PRI, las negociaciones aliancistas que permitieron recuperar importantes municipios y distritos electorales en la pasada elección del 2021.
Lo anterior, no quiere decir que tanto Martha Hilda González como Ana Lilia Herrera no tengan oportunidad de obtener la candidatura; el tema es que ambas mujeres se han desenvuelto políticamente en el ámbito local, durante estos últimos años.
Definidas las candidaturas de estas dos grandes alianzas (Morena-PT-PVEM y PRI-PAN-PRD), los juegos de cifras de intención del voto (reales y ficticias) y la guerra verbal se harán presentes en todos los medios de comunicación y las redes sociales. Pero lo cierto es que la alianza Morenista no la tiene tan sencilla como en repetidas ocasiones lo ha expresado Higinio Martínez. El comportamiento histórico-electoral de Morena, no le es favorable, y menos aún en estos tiempos en que el ejercicio del poder del presidente Andrés Manuel, está menguando su credibilidad y está erosionando el capital político de su partido.
Aunado a este desgaste, el próximo 10 de abril habrá una consulta para revocación de mandato, mediante la cual Morena y sus aliados han pretendido convertirla en una ratificación de mandato. Este domingo por la noche y en los días posteriores, todos los habitantes del estado de México conocerán la verdadera fuerza de Morena, así como su capacidad de movilización electoral.
En este sentido, la consulta de revocación de mandatopodría convertirse en la tumba política de Morena para la elección estatal de 2023. Y aún cuando algunos analistas políticos han visualizado (en el mejor de los casos) esta consulta como un laboratorio para 2024, para el caso específico del estado de México, los tiempos ya no les darán a los morenistas para recomponer todas las fallas en sus estrategias de acarreo de votantes, ni mucho menos en los niveles de aceptación social.
Pero si la participación en esta jornada del domingo 10 de abril resulta exitosa, en números reales, entonces la alianza PRI-PAN-PRD deberá adelantar sus tiempos políticos, electorales y de negociación. Ya veremos la próxima semana.
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